Editorial de Mundo Obrero / marzo 2007
Las mujeres representan el 52% de la población. Cuando se cumplen 150 años desde aquella primera protesta liderada por trabajadoras del textil para mejorar sus condiciones laborales en Nueva York en 1857, recordamos que la lucha por la igualdad y la emancipación de la mujer del sistema patriarcal, siempre existió.Muchos son -según las historiadoras- los hitos sobre la celebración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Uno de ellos cuando las mujeres rusas, hace 90 años, se amotinaron protestando por la falta de alimentos, escogiendo el último domingo de febrero para declarar una huelga en demanda de "Pan y Paz", en el inicio de la Revolución Rusa. Las mujeres rusas celebraron su primer día Internacional de la Mujer en 1913, en el marco de los movimientos en pro de la paz, en vísperas de la I Guerra Mundial. En Europa, al año siguiente, el 8 de marzo, las mujeres celebraban mítines para solidarizarse con las demás mujeres o para protestar contra la guerra.Posteriormente las movilizaciones de mujeres, tuvieron también un fuerte componente democrático: la lucha por el voto en Estados Unidos y otros países. El 8 de marzo (23 de febrero en el calendario ruso), se convirtió en el día reivindicativo y significativo de las luchas de las mujeres. Transcurridos tantos años, la realidad es que sólo en algunos lugares del mundo se reclaman los derechos de las mujeres y aún queda mucho por andar.El Área de la Mujer de IU denuncia que los salarios de las mujeres en España hoy son un 25% más bajos que los de los hombres, las mujeres sufren la mayor temporalidad en la contratación y superan el paro masculino en más del doble.Si esto es así en los ámbitos urbanos, llama la atención la mayor dificultad de las mujeres rurales y las emigrantes. A la vez que son las mujeres las que por estas causas reciben las prestaciones más bajas en el sistema de protección social y pensiones.Denuncia el Área de la Mujer de IU, que desde el PSOE se utiliza a la mujer como reclamo electoral anunciando medidas que tienen más de publicidad que de hechos concretos y nada de concreción en el presupuesto, como ejemplo la reducción de más de 6 millones de Euros en el programa de igualdad de oportunidades de las mujeres.La Secretaría de la Mujer del PCE también denuncia las discriminaciones de la mujer en el trabajo y que a día de hoy la igualdad real sea, siga siendo, una aspiración en los espacios de poder y de gestión claramente masculinos.Denunciar que no existan espacios que desarrollen políticas de igualdad transversales y que no haya una coordinación plena para cortar de raíz los elementos que motivan la violencia machista y la no existencia de políticas eficaces para impedir el sexismo en la educación y en los medios de educación.Las mujeres del PCE y de IU apuntan una serie de propuestas de las que destacamos las siguientes: - El 5 % de los Presupuestos Generales del Estado en políticas transversales.- Apuesta por lo público y acceso de las mujeres al empleo digno e igualdad en la promoción y el salario.- La incorporación de la perspectiva género en todas las políticas públicas.- Igualdad de derechos para mujeres inmigrantes y derogación de la Ley de Extranjería que las somete a doble discriminación.- La Ley Integral contra la violencia, parca en pretensiones transformadoras y casi nula en presupuesto.- La cacareada Ley de Dependencia, tacaña en objetivos y tendente a seguir relegando a las mujeres a los roles del cuidado, bajo pretexto de un "sueldo".- El proyecto de Ley de Igualdad, cicatera en propósitos renovadores, laboralmente deja todo en manos de la negociación colectiva y posterga la paridad para "otro momento".- La falta de políticas hacia mujeres prostituidas que aborde con firmeza esta forma extrema de violencia de género.- Que es improrrogable el compromiso explícito para acabar de una vez por todas con la desigualdad entre mujeres y hombres, a través de un Pacto de Estado que comprometa a todas las fuerzas políticas y organizaciones de mujeres, que abarque todos aquellos aspectos en que la discriminación se manifiesta.Las movilizaciones de las mujeres tuvieron una significación especial para la paz y la democracia, es a tener en cuenta, en un mundo que tantos años después, necesita de su empuje para conseguir y mantener aquellas luchas.
Las mujeres representan el 52% de la población. Cuando se cumplen 150 años desde aquella primera protesta liderada por trabajadoras del textil para mejorar sus condiciones laborales en Nueva York en 1857, recordamos que la lucha por la igualdad y la emancipación de la mujer del sistema patriarcal, siempre existió.Muchos son -según las historiadoras- los hitos sobre la celebración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Uno de ellos cuando las mujeres rusas, hace 90 años, se amotinaron protestando por la falta de alimentos, escogiendo el último domingo de febrero para declarar una huelga en demanda de "Pan y Paz", en el inicio de la Revolución Rusa. Las mujeres rusas celebraron su primer día Internacional de la Mujer en 1913, en el marco de los movimientos en pro de la paz, en vísperas de la I Guerra Mundial. En Europa, al año siguiente, el 8 de marzo, las mujeres celebraban mítines para solidarizarse con las demás mujeres o para protestar contra la guerra.Posteriormente las movilizaciones de mujeres, tuvieron también un fuerte componente democrático: la lucha por el voto en Estados Unidos y otros países. El 8 de marzo (23 de febrero en el calendario ruso), se convirtió en el día reivindicativo y significativo de las luchas de las mujeres. Transcurridos tantos años, la realidad es que sólo en algunos lugares del mundo se reclaman los derechos de las mujeres y aún queda mucho por andar.El Área de la Mujer de IU denuncia que los salarios de las mujeres en España hoy son un 25% más bajos que los de los hombres, las mujeres sufren la mayor temporalidad en la contratación y superan el paro masculino en más del doble.Si esto es así en los ámbitos urbanos, llama la atención la mayor dificultad de las mujeres rurales y las emigrantes. A la vez que son las mujeres las que por estas causas reciben las prestaciones más bajas en el sistema de protección social y pensiones.Denuncia el Área de la Mujer de IU, que desde el PSOE se utiliza a la mujer como reclamo electoral anunciando medidas que tienen más de publicidad que de hechos concretos y nada de concreción en el presupuesto, como ejemplo la reducción de más de 6 millones de Euros en el programa de igualdad de oportunidades de las mujeres.La Secretaría de la Mujer del PCE también denuncia las discriminaciones de la mujer en el trabajo y que a día de hoy la igualdad real sea, siga siendo, una aspiración en los espacios de poder y de gestión claramente masculinos.Denunciar que no existan espacios que desarrollen políticas de igualdad transversales y que no haya una coordinación plena para cortar de raíz los elementos que motivan la violencia machista y la no existencia de políticas eficaces para impedir el sexismo en la educación y en los medios de educación.Las mujeres del PCE y de IU apuntan una serie de propuestas de las que destacamos las siguientes: - El 5 % de los Presupuestos Generales del Estado en políticas transversales.- Apuesta por lo público y acceso de las mujeres al empleo digno e igualdad en la promoción y el salario.- La incorporación de la perspectiva género en todas las políticas públicas.- Igualdad de derechos para mujeres inmigrantes y derogación de la Ley de Extranjería que las somete a doble discriminación.- La Ley Integral contra la violencia, parca en pretensiones transformadoras y casi nula en presupuesto.- La cacareada Ley de Dependencia, tacaña en objetivos y tendente a seguir relegando a las mujeres a los roles del cuidado, bajo pretexto de un "sueldo".- El proyecto de Ley de Igualdad, cicatera en propósitos renovadores, laboralmente deja todo en manos de la negociación colectiva y posterga la paridad para "otro momento".- La falta de políticas hacia mujeres prostituidas que aborde con firmeza esta forma extrema de violencia de género.- Que es improrrogable el compromiso explícito para acabar de una vez por todas con la desigualdad entre mujeres y hombres, a través de un Pacto de Estado que comprometa a todas las fuerzas políticas y organizaciones de mujeres, que abarque todos aquellos aspectos en que la discriminación se manifiesta.Las movilizaciones de las mujeres tuvieron una significación especial para la paz y la democracia, es a tener en cuenta, en un mundo que tantos años después, necesita de su empuje para conseguir y mantener aquellas luchas.
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